martes, 22 de marzo de 2011

La vuelta de Estefano: I


Como las pelusas en el aire que se mueven sometidas a la turbulencia de mi propia

respiración me imagino mi propia muerte flotando en la órbita de todo, yo en esa ataúd
blanca que me hubiera tocado ese 4 de abril si mi hermano no me hubiera corrido y ese
auto hubiera pasado sobre mi abdomen, pero estoy acá, tecleando en un computador
público, ZETH para ser más exactos, y no puedo evitar pensar en la pregunta, sobre
todo estos días, con la muerte del Agustín en un accidente estúpido, incidental, aleatorio,
y la vida me golpea proponiendo que esto es azar y que la vida son relaciones causales
que cumplen las leyes de la física, y me deprimo, me deprime ser tan ateo, y pensar que
no existe nada como lo que a veces mi mamá me decía que era dios, me deprime pensar
en eso, en que yo hubiera podido estar en ese cerro y no el Agustín. Pero no es así, y
estoy en ZETH, revisando mi mail y mas tarde voy a ver facebook y voy leer wikepedia
y ver la televisión y pegarme una cacha con suerte si veo a mi polola, pero la pregunta
sigue ahí, como una rama en la nariz o como un estrangulamiento en la cara y la
garganta. Y con eso todas las cosas implotan y comienza el terremoto del sinsentido, y
como un hoyo negro literalmente absorbe todo hasta la literalidad, y quedo yo solo en
frente del computador, mirando mi próximo pequeño diploma de Licenciado en Física,
que también implota, con el sentido. ¿Para que?, ¿De que sirve tener un papel que
diga "licenciado en Física”?, ¿Voy saber más física?, ciertamente a priori no, pero si
fuera así: ¿Sirve saber más Física?, ¿Cual es el sentido?: ¿Qué me contraten en una
Universidad?, ¿Ganar un sueldo que me alcance para ir a chagua en la vacaciones?, ¿Para
jubilarme y poder ir Europa?. El sol eventualmente va explotar y todos los premios y
libros escritos van a derretirse y deformarse hasta convertirse en pequeñas partículas,
ondas electromagnéticas que viajan en el vacío, en el silencioso camino de la luz en el
espacio tiempo. Todo parece dar lo mismo y esta en el mismo nivel que yo y que las
teclas del computador de ZETH. Pero de repente me acuerdo de lo dice el profe Rüssel:
cuando hay un problema que no parece ir saliendo suavemente hay que devolverse en los
pasos y revisar que pasos no se hicieron bien, a si que me devuelvo un poco y la
respuesta es simple:

Hago Física por que puedo, por que me gusta, por que quiero tratar de poner en algún
lenguaje la belleza de la experiencia sensible, y por que no tengo otra cosa que hacer.

5 de enero del 2011
Estefano Poincaré

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